Haz escuchado hablar sobre este tratamiento estético? Hoy el Instituto Madeleine Meyer te presenta un poco de información sobre él.
Bajo el epígrafe “crioterapia” se engloban diversas técnicas que suponen una mejora de nuestra salud y bienestar general mediante los tratamientos en frío. Los primeros en popularizar estas técnicas han sido los deportistas de élite, que siempre tienen al alcance las ultimísimas novedades en investigación tecnológica para recuperaciones exprés. Es el caso del futbolista Cristiano Ronaldo quien en 2013 se dejaba fotografiar en un tanque de crioterapia, publicitando así las propiedades regenerativas de tejidos y musculares y de refuerzo del sistema inmunitario mediante bajas temperaturas.
Hablamos de entre 5 y -150 grados, con lo cual tienen que ser siempre aplicaciones controladas y limitadas en el tiempo, según los expertos en cada campo. Además de los beneficios arriba citados, a la exposición a las temperaturas extremas se le atribuyen también cualidades antiedad y adelgazantes.
El criorejuvenecimiento no es un concepto nuevo, sino que ya se ha trabajado con él en otros campos como el de la Ciencia Ficción e incluso en el de la Ciencia a secas, ante la posibilidad futura de que los seres humanos puedan volver a la vida en las mismas condiciones físicas en las que murieron, tras haber sido congelados. Ya habréis oído algunas leyendas urbanas al respecto, que hablan de que personajes míticos como Walt Disney se encuentren criogenizados en lugares secretos.
Mitos aparte, la estimulación de los receptores de calor produce un bombeo sanguíneo que oxigena las células y elimina las toxinas. Por lo tanto, ayuda a regenerar tejidos interna y externamente. Entre ellos, por supuesto, la piel, y así, nuestra apariencia. Una aplicación muy importante es la corrección de cicatrices, que, como vengo diciendo, no se borran, pero se pueden disimular según su tamaño y grosor.
Si de lo que hablamos es de adelgazar nos estamos refiriendo a la criolipólisis, una técnica en constante evolución, que consiste en la destrucción controlada del tejido graso mediante frío. Si se aplica en las áreas deseadas, se destruyen las células grasas gradualmente mediante procesos metabólicos.
Este tratamiento está en fase de estudio y se trata de comprobar, con resultados de entre dos y cuatro meses vista, qué efectos ofrece en la remodelación corporal y la lucha contra la flacidez y la celulitis.
Por supuesto, ya sabes que existen, a menor escala y mayor temperatura, productos que se basan el frío para la belleza local y el bienestar. Me refiero a los geles, tiras, fajas y hielo terapéutico, entre otros.
Encuentra este artículo en: www.nosotras.com